Laura ha tenido un mal día, pero cuando leo, su mejor amigo, le gana por tercera vez en el juego, su paciencia se acaba y le lanza una mala palabra... Cada uno se va a su casa, y ambos están muy disgustados: leo no comprende por qué lo ha insultado Laura, y Laura realmente no quería decirle algo así a su amigo, pero no sabe cómo arreglar las cosas.
La palabra está allí, haciéndole daño a todos, volviéndose cada vez más importante, ¿cómo deshacerse de ella? Este sencillo cuento aborda con humor e imaginación algunas emociones y sentimientos cotidianos de los niños y habla, en último término, de la fuerza de la amistad y la importancia del perdón. Los primeros lectores encontrarán en este libro un aliado maravilloso para comprender sus relaciones interpersonales.