Al combinar HTML, CSS y JavaScript se obtiene la tecnología adecuada para crear una página web; estos lenguajes fueron desarrollados de manera independiente, por lo que las modificaciones hechas en cada uno de ellos eran ajenas a los otros, este problema se resolvió con la creación de una nueva especificación llamada HTML5; esta especificación integra las tecnologías que intervienen en el desarrollo de una web.
HTML define la estructura de un documento, CSS prepara esa estructura y su contenido para ser mostrado en pantalla, y JavaScript otorga la capacidad de procesamiento para la construcción de aplicaciones web tal y como las conocemos en la actualidad.