El interés por los «temas modernos» llevaron a Zola a centrar en Les Halles, el Mercado Central de París, la acción de la tercera novela del ciclo de Los Rougon-Macquart. En ella Lisa, una próspera Macquart, hospeda inopinadamente a su cuñado Florent, prófugo del penal de Cayena, convicto por sus actividades republicanas. Con La conquista de Plassans (1874), la cuarta novela del ciclo, Zola vuelve al lugar de origen de los Rougon-Macquart. Aquí, en la engañosa tranquilidad de la provincia, , es un matrimonio entre primos de las dos ramas de la familia, Marthe Rougon y François Mouret, quien va a hospedar a un extraño sacerdote, sucio y pagado de sí mismo, que en poco tiempo se dispone a regir los destinos de Plassans e influir en las decisiones de sus ciudadanos. El matrimonio ve poco a poco que no sólo su casa y su ciudad dejan de ser suyos, sino que ellos mismos son desposeídos de su personalidad, inmersos en el éxtasis y en la locura.