Publicado originalmente en 1511, este texto satírico de corte filosófico escandalizó a una época y contribuyó al surgimiento de la reforma protestante. En la obra, la locura toma la palabra y elogia la ceguera y la imbecilidad de los hombres, quienes se dejan manipular por los poderosos y aceptan como ciertas las supersticiones. Estamos ante una crítica feroz a la Iglesia católica y a los excesos del papado, y un cuestionamiento del poder y el falso conocimiento de los gramáticos, filósofos y teólogos. En tono irónico, estas páginas explican por qué la locura tiene mayores ventajas que la racionalidad y afirman que los hombres son más felices cuando se encuentran bajo el dominio de la necedad. Prólogo de Paulina Rivero Weber. Erasmo de Rotterdam nació en Holanda en 1466 y falleció en Suiza en 1536. Clérigo de la orden de San Agustín y humanista que se caracterizó por su rebeldía y su lucha contra la barbarie de su tiempo, fue testigo de las pugnas y cismas religiosos del siglo XVI.