Las reglas Incoterms sirven para delimitar los derechos y las obligaciones de las empresas vendedora y compradora respecto a las condiciones de entrega de la mercancía en una operación de compraventa internacional.
Estas reglas, aunque no son obligatorias, en la práctica son imprescindibles para acordar cinco cuestiones clave: las obligaciones y los costes que asumen la parte vendedora y la compradora, en quién recae la obligación de realizar el despacho de aduanas y de asegurar la mercancía, y el lugar y momento de entrega de la mercancía y de los riesgos sobre ella.