Por medio de prácticas sociales del lenguaje en las que se trabajan la lectura, la escritura y el intercambio oral, los alumnos utilizan el lenguaje de forma significativa, además de tratar contenidos de otras asignaturas en actividades sociales relevantes para ellos.
Cada práctica social del lenguaje cierra con la producción de algún tipo de texto como un cuento o un texto informativo; un material gráfico como un cartel o un tríptico; o una situación de comunicación como una exposición.