Un estudio literario que quiera partir desde el principio, que pretenda arrancar desde el primigenio sentido literal del texto y que no eche demasiado en olvido que la obra ha sido creada para ser leída más que para ser analizada, debe asumir antes que nada una función orientadora y enriquecedora en la comprensión de la misma. En este libro se da cuenta, en el más puro sentido filológico, de los principales aspectos y cuestiones de que se viene ocupando la edición de textos, así como de las aportaciones más relevantes que se han producido en su campo de estudio desde la época humanística a la 'nueva filología', con la intención de ofrecer unos instrumentos válidos y aprovechables para quienes realicen la edición crítica de un texto.