Puro machote, el tono de la autora es en todo momento jocoso. Describe por dentro y por fuera a los machos de manera tal que los lectores puedan, entre risa y risa, entender mejor por qué los machos son como son, por qué actúan como actúan y, sobre todo, qué hay en realidad detrás de su fachada dura e impasible. Para redondear esta descripción, el libro contiene una serie de diez cosas que los "puro machotes" no hacen, así como un test para medir el nivel de hombría de quienes acepten resolverlo.