La obra maestra de Goethe es a la vez drama y misterio. Llena de simbolismo, magia y sucesos extraordinarios, no hay un pacto entre el bien y el mal tan célebre como el que se lleva a cabo entre Mefistófeles y el doctor Fausto.
El protagonista, desolado por su infelicidad y vejez, promete lo más preciado de su ser si el embajador de los infiernos le otorga el goce de la sabiduría y de la vida. El resultado de tan arriesgado acuerdo es memorable y aleccionador.